Circuito para perder peso desde casa
La semana pasada os presentábamos una rutina muy sencilla, con la que se podían hacer todo tipo de ejercicios de deslizamiento con tan solo un par de toallas. Sustituyendo los típicos discos deslizantes por un objeto que todo el mundo tiene, conseguimos los mismos beneficios sin tener que salir de casa. Como sabemos lo que cuesta cambiarse de ropa tras llegar del trabajo y coger el coche para ir al gimnasio, vamos a seguir presentando alternativas para que podáis trabajar absolutamente todos los aspectos físicos desde vuestro salón. En este caso con un circuito para perder peso desde casa.
La ventaja de los circuitos
Los circuitos son una forma muy eficaz de enfocar nuestro camino hacia la consecución de una meta deportiva, ya que reúnen una serie de ejercicios cuyos beneficios apuntan todos en la misma dirección. Es decir, elegir un circuito bien diseñado es clave para quitar del medio todas las actividades que no aportan nada a nuestros objetivos. Así, el tiempo empleado en entrenar estará mucho mejor aprovechado y sus frutos empezarán a verse antes.
Como ya hemos dicho, hoy vamos a proponerte un tipo de circuito hecho a medida para todas aquellas personas que queráis perder grasa corporal. Está formado por seis ejercicios diferentes que, en conjunto, logran hacer trabajar a todo el cuerpo, ya que la pérdida de peso no puede estar centrada solo en una zona. Su duración oscila entre los 30 y los 60 minutos, y está recomendado hacerlo 3 o 4 veces por semana, para poder alternar con un día de descanso.
Lo mejor de este circuito es que acepta varios niveles de exigencia, pero eso te lo explicaremos después de enumerar los seis ejercicios que forman parte del circuito para perder peso desde casa que hemos diseñado.
6 ejercicios para perder peso desde casa
Ejercicio 1:
Las archiconocidas ‘sentadillas’. Colócate erguido, con los pies a la altura de los hombros y sus dedos mirando ligeramente hacia fuera. Pon tus manos detrás de la cabeza y mantén la vista al frente. Inspira profundamente mientras doblas las rodillas y llevas los glúteos hacia el suelo; cuando tus piernas estén en un ángulo aproximado a los 90 grados, vuelve a la posición original manteniendo la espalda recta.
Ejercicio 2:
Flexiones o ‘push-ups’. Colócate a cuatro patas, con las manos apoyadas en el suelo a la altura de los hombros. Estira completamente las piernas, dejando que apoyen solo los dedos de los pies, y haz lo mismo con los brazos, para adoptar la postura típica del push-up. Flexionando solo los codos, desciende hasta que tu pecho esté a punto de tocar el suelo, entonces vuelve a subir estirando los brazos.
Ejercicio 3:
Colócate erguido, con los pies a la altura de los hombros. Da una zancada con una pierna y, lentamente, baja el torso mientras flexionas ambas rodillas. Cuando la rodilla de la pierna de atrás toque el suelo, regresa a tu posición inicial.
Ejercicio 4:
Para este ejercicio se necesita una barra de dominadas. Colócate debajo de la barra y agárrala con la palma de la mano mirando hacia ti. Eleva los pies para quedar colgando y sube hasta que la barbilla quede por encima de la barra, en ese momento, vuelve a bajar sin llegar a apoyar los pies.
Ejercicio 5:
Colócate a cuatro patas, con las manos a la altura de los hombros, las rodillas a la altura de las caderas y los dedos de los pies apoyados en el suelo. Manteniendo la espalda recta y la rodilla en un ángulo de 90 grados, lleva un talón hacia el techo hasta que el muslo y la espalda formen una línea recta, y entonces regresa a la posición original.
Ejercicio 6:
Para este ejercicio se necesita un banco o algo similar en el que apoyarse. Colócate delante de la superficie de apoyo y pon las manos en ella, a la altura de los hombros y con los dedos mirando hacia ti. Adelanta los pies hasta que las piernas queden completamente estiradas. En ese momento, comienza a bajar poco a poco, flexionando los codos hasta que queden alineados con los hombros y los glúteos estén a punto de tocar el suelo, y regresa a la posición original.
Apto para cualquier nivel de exigencia
El número de repeticiones dependerá de tu nivel de exigencia. Para aquellas personas que estáis empezando, recomendamos la siguiente progresión: el primer día, realiza el circuito tres veces con diez repeticiones de cada ejercicio; ve añadiendo una repetición más cada día hasta que consigas hacer tres rondas de 15 repeticiones cada una; cuando lo hagas, añade una ronda y vuelve a las diez repeticiones, para ir subiendo de nuevo una por cada día. Repite este proceso hasta que seas capaz de hacer seis rondas de 15 repeticiones cada una.
Cuando lo logres, será el momento de pasar a la versión avanzada de este circuito, que te traeremos la semana que viene.
¡A entrenar!