Otro de los beneficios que también habréis odio mencionar es la capacidad de perder peso bebiendo abundante agua. Esto ocurre por la siguiente razón, el agua previene la deshidratación la cual puede ser dar a que nuestro metabolismo se ralentice. Pero sobre esta cuestión hay otras opiniones, ya que hay profesionales que afirman que el agua contribuye en realidad a la calma de apetito y a la sensación de mayor saciedad, por esta razón aconsejan alimentos ricos en agua y con pocos valores calóricos, reduciendo de esta manera la ingesta de otros alimentos (Gottau, 2008)
Una de las cosas que no podemos pasar por alto cuando hablamos de este tema es la sed. La sensación de sed se trata de un hecho perjudicial ya que significa que nuestro cuerpo esta llegando a su primer nivel de deshidratación. Por este motivo, es aconsejable beber agua entre las comidas aunque no tengamos la necesidad de beber.
La cantidad recomendada por especialistas y doctores ronda los 2.5 L., diarios y durante la época verano se debe incrementar a 3.5L. Las personas con mayores necesidades de hidratación son: lactantes, niños, embarazadas, ancianos y deportistas.
Otros beneficios que debemos saber:
- Previene la formación de cálculos renales y disminuye la posibilidad de desarrollar infecciones urinarias
- Reduce el riesgo de problemas cardiacos
- previniendo de esa manera los calambres y evita la fatiga muscular.
- Aumente el control de bacterias en la boca y que se encuentran en la saliva; evitando la gingivitis (inflamación de encías), caries y otras enfermedades de la boca.
- Disminuye las probabilidades de infecciones virales como la gripe común.
Mantiene la piel suave e hidratada, el brillo en el cabello y las uñas sanas.
Imad El Haddadi B., artículo semanal.